Gracias a la reforma del Equilibrio de Poderes legislada en el año 2015, Gustavo Petro con su segunda posición en la actual contienda electoral, tendrá derecho a posesionarse como Senador de la república, brindándole la oportunidad de liderar la oposición del actual gobierno que recayó en manos del uribismo representados por su candidato Iván Duque.
Así como Petro tendrá por ley derecho a tomar una curul en el Senado, su fórmula vicepresidencial, Ángela María Robledo, podrá retomar su posición en la Cámara de Representantes, lo que permitirá fortalecer la oposición desde ya y probablemente brindar la oportunidad de generar la próxima candidatura alternativa para el año 2022.
Gustavo y Robledo son los primeros políticos en ocupar curules con esta figura jurídica-política que les permite llegar al Congreso sin participar en los comicios legislativos.
No obstante, Petro habría insinuado no tener intención de ocupar el puesto de senador para este periodo, lo que le han señalado de ser un error que le quitaría fuerza a elecciones sobrevinientes muy importantes para el país.
Algunos manifiestan que la insinuación del exalcalde de no querer volver al Senado, se debe a la influencia mediática que tendría, lo que llevaría a que la gente se canse de él creando más oportunidad a generar enemigos políticos, así lo planteó Alfonso Cuéllar para la revista Semana.
Cuéllar además opinó sobre la posición de Duque, a quien señaló de ser un gran candidato (ya presidente electo) para el uribismo por su característica de no tener historia ni investigaciones y que vivió fuera del país, por lo tanto, no tiene enemigos.
A la temática se sumó la opinión de Héctor Riveros de Blu Radio, quien desde ya asegura que la pregunta para dentro de cuatro años será cómo vencer al uribismo, lo que podría generar que Petro comience a ser nuevamente el opositor central o que aparezca una opción de centro que le quite su imagen de alternativa al uribismo
Es así como Riveros aseguró que la opción dentro de cuatro años estará planteada “con Petro o con una opción más moderada. Esta vez se optó por Petro, pero no estoy muy seguro de que logre mantenerse hasta el 2022”.
En rasgos generales, varios sectores esperan el regreso de Gustavo al Senado, donde siempre se caracterizó por sus arduos debates, planteamiento de temáticas importantes e investigaciones contra la corrupción que tanto necesita el país, las cuales esta vez se verán apoyadas por figuras anticorrupción como Antanas Mockus, Angélica Lozano, Inti Asprilla y demás políticos antiestablecimiento que generarán una fuerte oposición al gobierno, sin olvidar la influencia de Claudia López, quien a pesar de ya no estar con su curul en el Congreso, seguramente no descansará de sus ideales políticos actuales.