Tras semanas de tensión y violencia que dejaron más de 20 policías y militares asesinados en diferentes regiones del país, el denominado “plan pistola”, atribuido al Clan del Golfo, estaría llegando a su fin. Según fuentes de inteligencia la orden de cesar los ataques habría sido emitida directamente por Jesús Ávila Villadiego, alias Chiquito Malo, máximo cabecilla de esa estructura criminal.
Este violento plan, que generó alarma entre la ciudadanía y obligó a implementar medidas especiales de seguridad para los uniformados, fue una reacción del Clan del Golfo ante los recientes y contundentes golpes propinados por la Fuerza Pública en el marco de la Operación Agamenón, una ofensiva nacional contra las finanzas, estructura y liderazgos del grupo armado.
“Las órdenes de generar asesinatos a los policías o a los militares provienen directamente de alias Chiquito Malo”, confirmó el director de la Policía Nacional, brigadier general Carlos Fernando Triana, en una rueda de prensa. La ofensiva criminal, según el ministro de Defensa Pedro Sánchez, fue una respuesta desesperada del grupo ante los avances de las autoridades en el desmantelamiento de sus estructuras.
Desde el inicio de la Operación Agamenón el pasado 15 de abril, se han reportado 217 capturas, 15 abatidos en operaciones militares, y la incautación de 123 armas de fuego, más de 15.000 cartuchos, 6.800 kilos de estupefacientes, y la destrucción de 56 laboratorios ilegales. Entre los criminales dados de baja están alias Barranquilla y alias Mayinbu, vinculados al asesinato del subintendente Nelson Cárdenas en un ataque con explosivos en Salgar, Antioquia, que marcó el inicio de este periodo de ataques sistemáticos.
La operación Agamenón se basa en cinco líneas de acción: el desmantelamiento de economías ilícitas, la captura de cabecillas medios y altos, el combate a las conexiones internacionales del Clan del Golfo, y la depuración interna de posibles infiltrados en la Fuerza Pública.
A pesar de que el grupo armado habría ordenado detener los ataques, las autoridades han reiterado que las operaciones contra esta estructura continúan y no se detendrán hasta lograr su completo desmantelamiento.