Germán Vargas Lleras, el político que tuvo que asumir una de las decepciones más sorpresivas en las elecciones presidenciales de este 2018, no podía quedarse con el sinsabor que le dejó su baja votación, y ahora se está convirtiendo en una de las figuras con mayor importancia en el desarrollo legislativo que se está desenvolviendo durante estas semanas.
Todo esto fue afirmado en un análisis hecho por la revista Semana, en donde describen que Vargas Lleras resucitó dos meses después de haber caído en el impacto de su paupérrimo desempeño en las urnas, llevando a cabo acciones para favorecer a su partido político Cambio Radical y generar alianzas que le permitieran abarcar decisiones de poder.
Esto lo destaca Semana con las acciones que realizó el político para la restauración de su partido y el pacto de alianzas con colectivos fuertes como el partido de la U y el Liberal, con quienes buscó la manera de ejercer control sobre la fuerza del Centro Democrático en el Congreso.
De esta forma, el excandidato presidencial logró sin siquiera estar integrado en el Congreso, formar una gran coalición que contiene a 44 senadores y 90 representantes a la Cámara, lo que supera en gran número a los 19 senadores y 35 representantes que tiene el uribismo a la mano y con los que se creía ejercería control total sobre la rama legislativa.
Las acciones de Vargas y sus compañeros, junto a las acciones de la oposición que también ha reunido una fuerza bastante significativa con sus coaliciones y acuerdos, se convirtieron en la piedra en el zapato legislativo del nuevo gobierno, que ahora tendrá una labor más difícil y deberá guardar una actitud mucho más conciliadora con estas dos fuerzas políticas independientes del gobierno para lograr la aprobación de sus pretensiones legislativas y reformas programadas.
Según Semana, esto solo demuestra que “en la política no hay muertos”, y la elección de Iván Duque de su “gabinete técnico” sin una representación notable de fuerzas políticas, dio lugar a que los liberales y conservadores, que ya habían jurado unidad con el Gobierno, también tuvieran la libertad para hacer coaliciones como quisieran, lo que aprovechó de forma amplia el excandidato y exvicepresidente Germán Vargas. Fuentes consultadas: Pulzo y Revista Semana.