Redacción: laregional.net- Sincelejo-
Unas 35 mil 859 personas damnificadas, que equivalen a 15 mil 565 familias, es el balance que la ola invernal ha dejado en el departamento de Sucre, además de afectaciones de 3.600 ganaderos que han tenido que mover sus reses hacia otros territorios.
Aunque la Gobernación de Sucre reporta, con base en el Registro Único de Damnificados (RUD), reporta estas afectaciones, se estima que las cifras pueden ser mayores, si se tiene en cuenta que en muchas poblaciones aún los organismos de socoro están levantando los censos y que el ingreso de las aguas del río Cauca, por el inmenso boquete de Cara ’e Gato, permanece, a corte del pasado lunes.
La mayor afectación, por número de familias damnificadas, se encuentra en Majagual con 3.202 familias que equivalen a 8.274 personas. Le siguen Guaranda con 2.923 familias que las conforman 7.168 personas; San Benito y San Marcos, ambos con 2.732 familias reportadas; Caimito, con 2.465 familias; Sucre-Sucre, con 1.407 y Colosó, con 104 familias.
La afectación se concentra en 109 poblaciones (veredas, corregimientos y cabeceras) de 7 municipios. Algunas personas permanecen en los 29 albergues disponibles, 8 en la zona rural y 21 en la urbana.
PÉRDIDAS EN EL GANADO
El sector ganadero del sur del departamento de Sucre también se ha visto gravemente afectado por las inundaciones ocasionadas por las aguas del río Cauca.
Tan solo en las poblaciones de Guaranda, Majagual y Sucre-Sucre hay, según reporte del Comité de Ganaderos de la Mojana (Cogamojana), que preside Enrique Martínez Alemán, unas 500 reses entre muertas y desaparecidas en menos de un mes de esta tragedia.
Adicional a ello, Cogamojana reporta afectaciones de 3.600 ganaderos en esta subregión de Sucre que se han visto en la obligación de movilizar 84 mil 309 bovinos hacia las poblaciones altas de Achí, Sahagún, Chinú, Sampués, Sincelejo, Corozal, Sincé, Galeras, San Pedro y Betulia, entre otras.
Esta ola invernal también les ha ocasionado pérdidas lácteas por 250 mil litros a corte del fin de semana en tan solo en tres municipios de la Mojana.
Ante esta situación el Comité, en una carta enviada al gobernador Héctor Olimpo Espinosa Oliver, le plantea soluciones a mediano y largo plazo, entre ellas: un incentivo de 50 mil pesos por reses para dos meses de pasto, programas de repoblamiento bovino genéticamente mejorados, programas de repoblamientos de pastos, árboles (sistema silvopastoril), asistencia técnica, asistencia técnica agropecuaria a predios de zonas afectadas, programa de mejoramiento de vías terciarias y la construcción del dique por la margen izquierda del río Cauca con sus compuestas en sitios estratégicos
Los fuertes aguaceros que se presentan en la región Caribe por estos días siguen causando estragos. Durante el pasado fin de semana, al menos 200 casas fueron destruidas por el paso de un vendaval en la zona rural de El Carmen de Bolívar. Además, los campesinos reportaron pérdidas en 300 hectáreas de cultivo.
“150 casas se encuentran totalmente destruidas en las veredas Tierra Grata, Buenavista, san Carlos, Santa Lucía, Huamanga, Colinas del Venado, Ojo Seco, La Sierra, El Lázaro, Camaroncito, Don Cleto, Soriano y San Alejo, esto en la zona alta. También en la vereda Emperatriz y otras veredas de la zona baja”, aseguró Jorge Montes, coordinador general del proceso pacífico de reconciliación e integración.
Por su parte, Víctor Tirado, enlace de gestión del riesgo, explicó que al menos 130 familias han resultado afectadas.
“Estamos haciendo una valoración de los daños en el municipio. A día de hoy tenemos un reporte entre ocho veredas y corregimientos, tales como La Sierra, Tierra Grata, San Isidro, Santa Elena, Sierra Nevada, Colinas de Venado; y en la cabecera municipal hemos tenido afectaciones en la parte baja de El Prado, en Cantagallo, el Minuto de Dios y Buenos Aires, que hasta el momento han tenido afectaciones de inundación y de remoción en masa”, indicó Tirado.
Por otro lado, también se presentaron emergencias en San Juan de Nepomuceno, donde al menos 15 viviendas resultaron con afectaciones.
“Algunas láminas de zinc se volaron, se mojaron algunas cosas en las salas de sus casas, pérdidas materiales en las habitaciones, pero son daños menores”, explicó Wilfrido Romero, alcalde de San Juan Nepomuceno.
En Córdoba, 25 de los 30 municipios se han declarado en calamidad pública durante la actual temporada de lluvias, lo que deja más de 31.707 damnificados concentrados en cerca de 12.098 familias.