Redacción Sincelejo: Dairo Pérez Cuello
La sequía tiene a Sincelejo, capital del departamento de Sucre, en serios aprietos, pues la población de la zona rural vive un viacrucis para conseguir agua.
Al hacer un recorrido por la zona, Laregional.net pudo constatar que los pozos artesanales con los que se abastece la población están secos.
Desde hace más de 4 meses los habitantes de varios corregimientos del municipio de Sincelejo no han visto caer la lluvia, la fuerte sequía que los azota tiene desesperadas a más de 800 familias quienes mitigan su sed con pozos artesanales que ya alcanzaron su límite, así nos lo cuento, Nora Salcedo, líder del corregimiento La Chivera.
«Aquí la necesidad es totalmente apremiante, la única represa que tenemos en el pueblo, es el ‘pozo del gobierno’ y está totalmente seco, aquí nos abastecemos pidiendo favores a los señores que tienen fincas, que tienen sus pozos pero sin embargo ellos a veces se rebeldizan porque también necesitan su agua y no la quieren dar, ni vender».
Los terrenos que rodean estas viviendas son pruebas fehacientes de la falta de agua, el pasto seco se incendia constantemente por las altas temperaturas, lo que genera un panorama bastante desolador para las familias.
María Álvarez, otra afectada, nos contó su situación: “Tenemos que ir a los pozos para abastecernos y asear las cosas de la casa, pero el agua del pozo ahora mismo está horrible, está totalmente sucia ya usted vio el agua del alcantarillado, y cuando uno consigue para lavar, el humo de los incendios nos ponen la ropa hedionda, aquí no sabemos ni que hacer, si no llueve la cosa se pondrá más grave «.
Los niños de la zona rural han empezado a padecer algunos problemas en la piel por el agua con que los bañan, la población de los corregimientos como La Chivera, Barro Prieto y La Gulf esperan que la naturaleza se apiade de ellos y cuanto antes caigan las lluvias.
La administración municipal cada ocho días envía carro tanques para mitigar un poco la situación de esta población, sin embargo por causa de la sequía no han sido suficientes.