Lo que inicialmente fue considerado como una muerte accidental con arma de fuego pasó a ser confirmado por la Sijín de la Policía del Magdalena como un hecho planeado y ejecutado -al parecer- por dos individuos, entre ellos, Yan Carlos Jiménez Tatis, de 22 años, quien fue capturado y posteriormente encarcelado, tras ser uno de los presuntos responsables de ese hecho de sangre, cuya víctima fue su propio primo.
Se trata de un suceso ocurrido el 16 de marzo del 2018 en el corregimiento de Orihueca, municipio de Zona Bananera, Magdalena, donde resultó herido a bala Manuel Salvador Tatis Elles, quien murió cuando era atendido en la Policlínica ubicada en el vecino municipio de Ciénaga al ser impactado en la cabeza con dicho proyectil.
LOS HECHOS:
De acuerdo con la Sijín, los hechos se registraron al interior de un billar situado en el barrio San Fernando de esa población magdalenense.
“Según versiones preliminares, la víctima había cerrado el establecimiento comercial donde trabajaba y luego se había dispuesto a limpiar su revólver, que supuestamente se le disparó de forma accidental. Salvador fue y trasladado al centro asistencial de Ciénaga, pero los médicos no pudieron hacer mucho porque la bala se alojó en su rostro”, informaron las autoridades.
Sin embargo, la posible causa de la muerte no encajaba en el marco de las pesquisas realizadas por los investigadores de la Sijín, cuyos cotejos en la escena y respectivas consultas a personas cercanas a la víctima tendieron a desvirtuar que “el arma presuntamente fue accionada por otra persona”.
Dichas indagaciones apuntaron a que Yan Carlos Jiménez podría ser uno de los implicados en el crimen.
A Yan Carlos Jiménez le pesaba una orden judicial por la presunta participación en el homicidio. La detención se hizo efectiva en vía pública de Orihueca.
Jiménez Tatis, fue dejado a disposición del Juzgado Promiscuo Municipal de Puebloviejo, Magdalena, como autoridad que lo requiere por el presunto delito de homicidio.
Finalmente, un juez de control de garantías le dictó medida de aseguramiento preventiva en centro carcelario. Mientras que los móviles aún son investigados.