“El alvarismo es una secta”, indicó el polémico concejal de Medellín, Santiago Jaramillo, que es recordado por sus desmedidas intervenciones en contra de varios personajes políticos, entre ellos quien sería su jefe natural el expresidente Alvaro Uribe.
El cabildante elegido con el aval del Centro Democrático, partido del que fue expulsado, asegura que el exmandatario obliga a los integrantes del partido uribista a dar cuotas de dinero de forma mensual, lo que él mismo calificó como “vacunas políticas” para financiar las campañas que en esos momentos se avecinaban.
Jaramillo habló de su aspiración a la alcaldía de Medellín, pero volvió a reprochar que en la “secta monoteísta” del uribismo no se puede hacer nada sin que el expresidente dé el visto bueno, por lo que considera que el Centro Democrático no es un partido político, sino que son varias personas “que siguen a un dios” y no cuestionan sus decisiones sino que simplemente las cumplen a cabalidad.
Igualmente dijo que para él no fue fácil tener que entregar, de manera mensual, un monto estipulado para los llamados talleres democráticos, toda vez que Álvaro Uribe se acercaba a los miembros electos y les pedía supuestamente una cuota, algo que para él era completamente difícil sacar porque pertenece a la clase media y no a los adinerados “alvaristas” promedio.
Santiago se hizo viral en redes sociales por un video donde aseguraba que le habían quitado su anillo de seguridad a propósito y le gritaba al presidente Juan Manuel Santos “quiébrame la nalga”, ya que consideraba lo hecho como un atentado en su contra; hoy afirma que su paso por el Centro democrático fue bastante tortuoso porque muchas veces no podía continuar con sus iniciativas como concejal, debido a que estas debían ser aprobadas por el líder.
Hoy el político afirma que se convertirá en el nuevo alcalde de los medellinenses con ayuda del movimiento que impulsa llamado ConSenSo. Fuente consultada: La Tele Letal.