Después de 18 años los habitantes de Santa Cecilia no pueden olvidar los momento de terror que les toco vivir aquella tarde del 28 de enero del 2000 cuando un grupo de 60 hombres del Bloque Norte de las autodefensas Unidad de Colombia (Auc) llegaron en dos camiones al corregimiento de Santa Cecilia, en el municipio de Astrea, en el Cesar.
El grupo paramilitar recorrieron el pequeño corregimiento con lista en mano sacaron a 13 personas entre las que se encontraban Néstor Ortega un funcionario público del pueblo y Darwin Salcedo profesor de la escuela, estas personas fueron sacadas de sus casas, las obligaron a agruparse en la plaza del pueblo, las amarraron y luego de unas horas las asesinaron.
Las víctimas estuvieron amarradas más de 10 horas a la vista de los demás habitantes y sus familiares tuvieron que llevarles comida, mientras los ‘paras’ transitaban por el 
pueblo saqueando las tiendas y jugando billar.
El ex jefe paramilitar Jhon Jairo Esquivel, alias ‘El Tigre’, admitió la responsabilidad por haber coordinado la masacre donde murieron 13 habitantes del Corregimiento de Santa Cecilia perteneciente al municipio de Astrea ubicado al norte del departamento del Cesar.