“Lo que pasa en la salud en Colombia es una vagabundería criminal que atenta contra la salud y la vida de los colombianos”, dijo el Defensor del Pueblo, Carlos Alfonso Negret Mosquera, luego de una mesa de trabajo con el Procurador, Fernando Carrillo; el Ministro de Salud, Juan Pablo Uribe; el Superintendente Nacional de Salud, Fabio Aristizábal Ángel, y representantes de las EPS.
“Aquí la prioridad es la atención de los afiliados y por eso compartimos la actuación de la Procuraduría en la solicitud de revocar la venta de Cafesalud a Medimás por incumplimiento de los términos acordados”, reiteró el Defensor Negret Mosquera.
La Defensoría del Pueblo había evidenciado la situación y en noviembre de 2017 le pidió a la Corte Constitucional que interviniera para proteger a los usuarios de Medimás, pero esto no se hizo y el incumplimiento de quienes compraron Cafesalud precipitó la revocatoria de la venta.
Además, la Defensoría realiza visitas a esa EPS en varias regiones del país, en las que encontró problemas como la falta de oportunidad en la atención médica, tanto de medicina general como de citas por especialistas, o la entrega parcial o nula de medicamentos, en especial de alto costo.
“Los colombianos se acercan a la Defensoría, a la Personería, a la Procuraduría a que les presentemos tutelas porque no les dan el servicio. De modo que es el momento de parar y de que el sistema funcione. Nuestra única intención siempre ha sido garantizar el derecho a la salud de los afiliados”, enfatizó el Defensor del Pueblo.
Y por ello, concluyó que “el servicio se va a seguir prestando, y van a tener al Contralor, al Procurador y al Defensor del Pueblo encima si alguna de estas personas no son atendidas. Igual el Superintendente y el Ministro de Salud”.